Descubre cómo preparar un plato exquisito que combina la suavidad de las patatas, el sabor del salmón y la cremosidad de la salsa holandesa. Ideal para una cena especial o un almuerzo elegante, esta receta no solo es fácil de hacer, sino que también impresionará a tus invitados. ¡Vamos a cocinar!
Ingredientes Necesarios
- 500 gramos de patatas (preferiblemente de tipo nuevo)
- 400 gramos de filete de salmón fresco
- 3 yemas de huevo
- 200 gramos de mantequilla
- 1 cucharada de zumo de limón
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
- Unas ramitas de eneldo fresco (opcional, para decorar)
Instrucciones Paso a Paso
Preparación de las Patatas
Comienza lavando bien las patatas bajo agua fría para eliminar cualquier suciedad. Si deseas, puedes pelarlas, aunque la piel añade un extra de sabor y textura. Corta las patatas en mitades o cuartos, dependiendo de su tamaño, para que se cocinen de manera uniforme. Llena una olla grande con agua, añade una pizca de sal y lleva a ebullición.
Una vez que el agua esté hirviendo, agrega las patatas y cocina durante aproximadamente 15-20 minutos o hasta que estén tiernas al pincharlas con un tenedor. No las cocines demasiado, ya que deben mantener su forma. Una vez cocidas, escúrrelas y resérvalas.
Cocción del Salmón
Mientras las patatas se cocinan, puedes preparar el salmón. Precalienta una sartén a fuego medio-alto y añade un poco de aceite de oliva. Sazona los filetes de salmón con sal y pimienta al gusto. Cuando la sartén esté caliente, coloca los filetes de salmón con la piel hacia abajo y cocina durante unos 4-5 minutos, dependiendo del grosor del filete.
Voltea los filetes con cuidado y cocina por el otro lado durante otros 3-4 minutos. El salmón debe estar dorado por fuera y ligeramente rosado en el centro. Retíralo del fuego y déjalo reposar mientras preparas la salsa holandesa.
Preparación de la Salsa Holandesa
La salsa holandesa es un emulsionado de yemas de huevo y mantequilla, ideal para acompañar platos de pescado. En un bol resistente al calor, coloca las yemas de huevo y el zumo de limón. Bate las yemas a baño maría (colocando el bol sobre una olla con agua hirviendo, sin que el agua toque el bol) hasta que espesen y se vuelvan de un color amarillo pálido.
Mientras bates, derrite la mantequilla en una cacerola a fuego bajo hasta que esté completamente líquida. Una vez que las yemas estén listas, retira el bol del fuego y comienza a añadir la mantequilla derretida poco a poco, mientras sigues batiendo enérgicamente. La salsa debe volverse cremosa y espesa. Si es necesario, ajusta la sal y añade un poco más de zumo de limón al gusto.
Montaje del Plato
Para servir, coloca una porción de patatas en el plato, seguida de un filete de salmón. Vierte generosamente la salsa holandesa por encima y, si lo deseas, decora con ramitas de eneldo fresco. Este plato no solo es delicioso, sino que también es visualmente atractivo, perfecto para cualquier ocasión especial.
Tiempo de Cocción
El tiempo total de preparación y cocción para esta receta es de aproximadamente 45 minutos. Esto incluye el tiempo para cocinar las patatas, el salmón y preparar la salsa holandesa. Es un tiempo razonable para una comida gourmet en casa, y el resultado vale la pena el esfuerzo.
Consejos Adicionales
- Selecciona ingredientes frescos: La calidad del salmón y las patatas marcará la diferencia en el sabor final del plato.
- Variaciones: Puedes sustituir el salmón por otro pescado de tu elección, como la trucha o el atún, si prefieres algo diferente.
- Haz la salsa con anticipación: La salsa holandesa se puede hacer un poco antes y mantener caliente a fuego muy bajo, pero asegúrate de revolverla ocasionalmente para evitar que se separe.
Conservación
Este plato es mejor disfrutarlo fresco, pero si te sobran ingredientes, puedes almacenar las patatas y el salmón en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta 2 días. La salsa holandesa es más delicada y se recomienda consumirla el mismo día, ya que puede perder su textura y sabor con el tiempo. Si decides recalentar el salmón, hazlo a fuego bajo para evitar que se seque.
¿Puedo hacer la salsa holandesa sin mantequilla?
La mantequilla es un ingrediente clave en la salsa holandesa, ya que le proporciona su textura cremosa y sabor característico. Sin embargo, puedes experimentar con aceites de calidad como el aceite de oliva, aunque el resultado no será exactamente el mismo.
¿Puedo usar salmón congelado para esta receta?
Sí, puedes utilizar salmón congelado, pero asegúrate de descongelarlo completamente en el refrigerador antes de cocinarlo. Esto ayudará a mantener su textura y sabor durante la cocción.
¿Es necesario usar yemas de huevo frescas para la salsa?
Para obtener los mejores resultados, es recomendable utilizar yemas de huevo frescas. Las yemas pasteurizadas pueden ser una opción si tienes preocupaciones sobre la seguridad alimentaria, pero la textura y el sabor pueden variar.
¿Qué tipo de patatas son las mejores para esta receta?
Las patatas nuevas o las patatas para hervir son ideales para esta receta, ya que tienen una textura más suave y se mantienen firmes durante la cocción. Patatas como las Yukon Gold son una excelente opción.
¿Puedo preparar este plato con anticipación?
Si bien es mejor disfrutarlo fresco, puedes preparar las patatas y el salmón con anticipación. Simplemente recalienta suavemente antes de servir y prepara la salsa justo antes de montar el plato para asegurar la mejor textura y sabor.